Desde Elon Musk hasta Fei-Fei Li: la publicación consagra a los líderes que han acelerado la carrera por la inteligencia artificial, advirtiendo que la humanidad avanza «sin frenos» hacia un futuro automatizado.

El año en que la IA dejó de ser una promesa para volverse el motor del mundo

La revista Time ha revelado su decisión más esperada del año, y en este 2025, el galardón de «Persona del Año» no recae en un individuo, sino en un colectivo: «Los Arquitectos de la IA». Este reconocimiento agrupa a figuras icónicas como Jensen Huang (Nvidia), Mark Zuckerberg (Meta), Elon Musk (X) y Sam Altman (OpenAI), subrayando que nadie ha tenido un impacto tan radical en la economía y las instituciones como quienes diseñan los algoritmos que hoy rigen nuestra cotidianidad.

El nombramiento ocurre en un punto de inflexión donde el debate sobre el uso responsable de la tecnología ha sido desplazado por una carrera frenética por la implementación. Según el editor jefe de Time, Sam Jacobs, estos «titanes» han llevado a la especie humana a una velocidad de automatización que ya no permite marcha atrás.

Un nuevo «Almuerzo en el Rascacielos»

La portada principal de la revista rinde homenaje a la mítica fotografía Lunch atop a Skyscraper, pero sustituye a los obreros de la Gran Depresión por los magnates del silicio. En la imagen aparecen líderes como Lisa Su (AMD), Dario Amodei (Anthropic) y la «madrina» de la IA, Fei-Fei Li. Esta metáfora visual no es azarosa: representa la construcción de una nueva infraestructura global, ya no de acero, sino de datos y redes neuronales.

Expertos consultados por la BBC y Time coinciden en que 2025 es el año de la integración total. La IA ya no es solo un chatbot al que se le hacen preguntas; está integrada en el hardware, el software y los servicios básicos, de modo que millones de personas la utilizan de forma invisible e inconsciente.

Impacto en la sociedad

Si bien los «arquitectos» están en la portada, la experta en ciberseguridad Alina Timofeeva advierte que el resultado final dependerá de cómo la ciudadanía aplique estas herramientas.

¿Será la IA un multiplicador de oportunidades o se convertirá en un catalizador de mayor desigualdad? Mientras líderes como Sam Altman celebran que 800 millones de personas usan ChatGPT semanalmente, la responsabilidad de que estos sistemas sean fiables y alineados con los valores humanos recae sobre un grupo muy reducido de personas que, en palabras de Time, avanzan hoy «sin frenos».