El ministro Montes bajó el perfil tras sus recientes comentarios acerca de los supuestos vínculos de integrantes de la toma de San Antonio con la campaña de la candidata Jara, enfatizando que “no quiso provocar ninguna polémica”.

Durante una entrevista, el secretario de Estado aseguró que su intención no fue generar conflictos, y que centrarse en estos temas podría desviar la atención de asuntos más relevantes para la ciudadanía.

El contexto de sus declaraciones

Montes había mencionado previamente la posibilidad de conexiones entre algunos involucrados en la toma del puerto de San Antonio y la campaña de la candidata Jara, lo que generó críticas inmediatas de diversos sectores políticos.

“El debate sobre esto nos desvía de lo importante”, señaló Montes, quien reiteró que su foco sigue estando en temas de gestión y políticas públicas.

El ministro insistió en que no busca involucrarse en polémicas electorales, y que sus comentarios se basaron únicamente en información preliminar que no pretendía responsabilizar a ningún grupo específico.

Repercusiones políticas

Analistas políticos consideran que el llamado de Montes a centrarse en la agenda pública busca evitar tensiones durante un período de alta movilización social y actividad electoral.

“Ministros y autoridades deben mantener la institucionalidad y no ser arrastrados por debates que puedan polarizar innecesariamente la opinión pública”, comentó un experto en comunicación política.

La polémica surge en un contexto de creciente atención mediática sobre los comandos de campaña y las protestas locales, lo que aumenta la sensibilidad respecto a declaraciones públicas de autoridades.