domingo | 28 de abril | 2024

inicio Araucanía Estamos con la basura hasta el cuello; siete comunas envían sus residuos al Biobío
Araucanía Opinión

Estamos con la basura hasta el cuello; siete comunas envían sus residuos al Biobío

Publicado por: DiarioTiempo21 | lunes 15 de mayo de 2017 | Publicado a las: 11:53

Compartir esta noticia

El seremi del Medio Ambiente, señala que la situación es muy preocupante y aun más compleja porque “ninguna comunidad quiere ver un relleno sanitario cerca de su casa”.

Dijo que los municipios “no tomaron decisiones a tiempo para planificar su disposición final a tiempo” y recordó el caso de Temuco que sabía el cierre del vertedero Boyeco el 2008- 2009.

Las comunas de Collipulli, Los Sauces, Purén, Lautaro, Lumaco, Padre Las Casas, Temuco, Renaico, están trasladando sus residuos sólidos –basura- a comunas de la Región del Biobío por el cierre de sus sitios, rellenos sanitarios o vertederos, que evidencian que La Araucanía está llegando a niveles de saturación que aumenta la compleja situación de los municipios en esta materia y que la región no ha sido capaz de abordar satisfactoriamente.

La información aparece en un documento del Ministerio del Medio Ambiente “Situación actualizada al 20-12-2016”.

El panorama es más complejo cuando el citado informe señala que la mayoría de las comunas tienen sus recintos al borde de la vida útil, que vencería en los próximos dos años y con un incierto diagnóstico para cuando llegue el día del cierre definitivo.

La excepción es la comuna de Freire, cuyo relleno sanitario tiene una vida útil calculada hasta el 2.033, pero cuyo municipio observa que se ha generado un “aumento en la generación de residuos, debido principalmente al aeropuerto y al Servicentro Copec”.

Sin embargo, comunas como Gorbea la vida útil de su vertedero se agotó en 1016 “no tiene espacio y se trabaja en frente reducido”. Curacautín también se agotó el año pasado su vertedero y registra “falta material de cobertura, sitio colapsado”.

Angol, por su parte, su vertedero fue cerrado en 2015 y el informe señala que “el sitio está colapsado, sin posibilidades de mejora”. En cuanto a Temuco, su basura es destinada a Los Ángeles y se teme que antes de lo presupuestado, se le impida continuar con el convenio acordado con la empresa propietaria de la planta de tratamiento de esa ciudad.

De acuerdo a ese informe, la vida útil de rellenos y vertederos se cumpliría en los próximos años, según el siguiente detalle:

Victoria, 31-12-2018; Villarrica 31-12-2019; Temuco 31-12-2016; Pitrufquén 31-12-2018; Freire 31-12-2033; Gorbea 31-03-2016; Cunco 2012-2019; Traiguén 31-12-2020; Curacautín 30-06-2016; Teodoro Schmidt 31-12-2017; Toltén 31-12-2022; Pucón 31-12-2020; Nueva Imperial 31-12-2018; Carahue 31-12-2023; Vilcún 31-10-2017; Angol  31-12-2015; Ercilla 31-12-2024.

Las demás comunas tienen sus vertederos o rellenos sanitarios cerrados.

Las comunas de Angol, Gorbea y Curacautín lograron que los responsables de la resolución sanitaria, la seremi de Salud, extendiera el plazo, luego que los municipios o privados, realizaran mejoras para continuar depositando allí sus residuos.

“Situación preocupante”

Para el secretario ministerial del medio Ambiente, Marco Pichunman, señaló que “nuestra región posee 16 sitios activos para la disposición final de los residuos domiciliarios, de los cuales solo tres están en la categoría de rellenos sanitarios. Los otros 13 son vertederos y que la mayoría de ellos tienen fecha de caducidad.

Desde el punto de vista del Medio Ambiente, ¿cómo está el panorama de los vertederos en nuestra región?

-El Ministerio del Medio Ambiente periódicamente ha monitoreado las condiciones en el país y hoy podríamos señalar que los dos problemas que Chile tiene medioambientalmente son dos: la calidad del aire por una aparte y al manejo de la gestión los residuos domiciliarios por otra. El tema del manejo de los residuos domiciliarios no solo atañe a los municipios por ley, sino también se está transformando en una preocupación de los ciudadanos. Es importante señalar que hoy la gestión de los residuos está sufriendo ciertos problemas a partir de la falta de sitios aprobados en Chile y La Araucanía no es la excepción. Nuestra región posee 16 sitios activos para la disposición final de los residuos domiciliarios, de los cuales solo tres están en la categoría de rellenos sanitarios. Los otros 13 son vertederos y que la mayoría de ellos tienen fecha de caducidad, sin muchos de ellos con posibilidad de hacer mejoras que permitan mejorar su condición. Por lo tanto, efectivamente nos acercamos a una situación preocupante y el llamado a los municipios es a tomar medidas con anticipación para cumplir la Ley de Municipalidades mandata, como es recoger y disponer los residuos domiciliarios.

Si bien es cierto la ley lo señala así, las municipalidades se quejan y esperan la intervención del Gobierno Regional, por la envergadura económica que significa esta misión. ¿Usted estima que los municipios y los gobiernos regionales no han sido muy proactivos en la materia?

-Pasa que estamos asistiendo a un cambio de paradigma desde la visión más localista en el manejo de este tema hacia una visión más regionalista. Hay regiones que han estado asumiendo esto desde los gobiernos regionales no solamente aportando recursos sino también trabajando en planificación para ayudar a los municipios a cumplir esta tarea. La logística para trasladar los residuos es compleja, costosa y eso también requiere un diseño territorial. En ese sentido el Gobierno Regional sí ha estado trabajando en una política regional de residuos. Hoy hay una consultoría bastante importante que se está desarrollando en la región precisamente para dilucidar estas variables asociadas a volúmenes, caracterización de los residuos, pero también en una planificación territorial en esta materia.

Recordemos que una de las complejidades asociadas a estos temas, tiene que ver con que ninguna comunidad quiere ver un relleno sanitario cerca de su casa y eso complejiza aun más la decisión respecto a decisiones más regional, territorial.

Según informe de su propia cartera, a diciembre de 2016, ay ocho municipios que disponen sus residuos en lugares que pertenecen a comunas de la región del Biobío. ¿Significa que estamos más atrasados con respecto a otras regiones?

-Diría que no se tomaron las decisiones a tiempo, por parte de los municipios principalmente, en el sentido de planificar su disposición final a tiempo. Recordemos que en Temuco comenzó un plan de cierra del vertedero de Boyeco por allá por el 2008- 2009. En esa fecha se sabía que el vertedero de Boyeco tenía cierre ¿qué pasó en todos estos años?. Por lo tanto,  hay allí una responsabilidad política en ciertos ediles en proyectar una política a largo plazo.

Usted señala que hay 13 sitios que están por agotar su vida útil ¿en cuánto tiempo estima que llega el plazo final para estos?

-Eso hay que verlo caso a caso. Si bien es el Ministerio de Salud que entrega estos permisos para esa vida útil, los municipios podrían realizar mejoras para prolongar esa vida útil de esos recintos y por eso hay que ir mirando caso a caso y digo que los alcaldes aun tienen mucho por hacer. Por cierto hay situaciones más críticas porque algunos recintos no tienen posibilidad de mejora alguna y son esos municipios que están buscando otras comunas para disponer para llegar ahí con sus residuos.

Pero esa es una solución de emergencia, como Temuco, porque son plazos acotados, breves en el tiempo….

-Sucede que para el Ministerio del Medio Ambiente la solución pasa por otra parte. Nuestra política no apunta al mejoramiento de los rellenos sanitarios sino que apunta a reducir los productos que van a disposición final. Por eso hablamos de recuperación, reutilizar y reciclar: las tres erres. Hablamos de economía circular, es decir, que en este proceso de generación de productos también existen cadenas en que estos productos puedan ser recuperados y se les pueda dar otra utilidad. Las políticas del Ministerio y del Gobierno de la Presidenta Bachelet apuntan a aumentar las tasas de reciclaje en Chile porque es allí donde radica el problema. Nuestros estilos de hábito y consumo hacen que todavía estemos en el mundo de lo desechable y a eso es lo que hay que superar.

Estamos atrasados en vertederos medioambientalmente aptos, tampoco vemos campañas que enseñen el manejo de los residuos. Si culturalmente tampoco cumplimos con la norma es porque no hay campañas masivas, prácticas para que cambiemos esos hábitos y empezar con las tres erres que usted señala. Eso lo vemos en Temuco…

-Sí. El Gobierno durante el año pasado promulgó la ley de responsabilidad y de fomento del reciclaje. En esa ley están contenidas las normas básicas para generar una cultura distinta respecto al consumo, donde principalmente el Ministerio va a imponer tasas de productos a empresas importadoras o generadoras de ciertos productos definidos como prioritarios, entre ellos envases y embalajes, principalmente que consumen las familias. Lo que pasa que la recuperación de esos productos va a estar a cargo de estas empresas de manera obligatoria y allí se van a generar cadenas de gestión que apuntan a evitar que muchos de ellos vayan a disposición final. Con eso esperamos subir las tasas de reciclaje que son muy bajas en Chile, cerca del 20 o 30% igualándolas a países de la OCDE que tienen altas tasas.

En el último tiempo ha aparecido en Temuco una empresa con el concepto de Basura Cero, ¿esa es una opción?

-Todo lo que tienda a disminuir productos que generan residuos, o más bien, todas las conductas que tengamos para reducir o recuperar elementos y disminuir la cantidad de elementos que van a disposición final, son bienvenidas. Si eso se llama basura Cero, en buena hora. Sabemos que falta mucho para aquello, necesitamos hacer mucha educación ambiental; necesitamos comprometer a las empresas para tener productos biodegradables; avanzar en el bioetiquetado y en un montón de iniciativas que de la mano de la ley, van a ir apareciendo en nuestra economía.

¿Es un avance que asociaciones de municipalidades tengan un recinto, una planta de tratamiento, común para la disposición de los residuos sólidos?

-Eso está más asociado a las economías de escala, por cierto sería un beneficio para los municipios el ahorrarse dinero en mover basura. Hoy gran parte de los presupuestos municipales están destinados a mover basura de un lado para otro. Por eso hay que cambiar el sentido de las cosas a lo que debe apuntar: que tengamos mercados y economías más sustentables; familias que capacitadas que entiendan el problema medioambiental detrás del consumo irracional. Eso es lo que tenemos que superar.


Compartir esta noticia