El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco condenó a David Eusebio Segundo Calfunao Sánchez a la pena de cumplimiento efectivo de 5 años y un día de presidio, accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena; más el pago de una multa de 40 UTM, en calidad de autor del delito consumado de tráfico de sustancias estupefacientes o psicotrópicas. Ilícito perpetrado en abril del año pasado, en la comuna de Perquenco.

En fallo unánime (causa rol 56-2025), el tribunal –integrado por los magistrados Cecilia Subiabre Tapia (presidenta), Leonel Torres Labbé (redactor) y Priscilla Frantzen Cervantes– condenó, además, a Calfunao Sánchez a 3 años y un día de reclusión efectiva y accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena, como autor del delito consumado de porte ilegal de arma de fuego convencional.

En la causa, el tribunal impuso a Calfunao Sánchez 541 días de presidio y accesoria de suspensión de cargo u oficio público durante el tiempo de la condena, como autor del delito consumado de porte de municiones.

Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e incorporación en el registro nacional de ADN de condenados. Asimismo, se decretó el comiso de las especies y dinero incautados en el procedimiento.

El tribunal dio por establecido, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 00:50 horas del 21 de abril de 2024, en el marco de un control vehicular con can detector de drogas, David Calfunao Sánchez fue sorprendido mientras viajaba en un bus rural de la comuna de Perquenco, portando y transportando un bolso que contenía dos paquetes envueltos en papel aluminio por un peso de 2,215 kilogramos, cuya naturaleza no se logró determinada y un tercer paquete envuelto en nylon contenedor de 550.650 gramos de clorhidrato de cocaína. Además, mantenía en su poder dos armas de fuego (revólveres), calibre .22 y .38, respectivamente, y 136 cartuchos de diversos calibres, sin contar con autorización de autoridad competente para la tenencia o porte de armas y municiones.