Publicado por: Tiempo21 | miércoles 12 de noviembre de 2025 | Publicado a las: 15:53
La movilización estudiantil, que suma más de una semana, exige medidas concretas tras denuncias por acoso contra un profesor. La universidad aseguró que aplica los protocolos de género y convivencia, pero los alumnos califican la respuesta como insuficiente.
En la Universidad Católica de Temuco, región de La Araucanía, estudiantes de la carrera de Psicología mantienen un paro indefinido y la toma del edificio en protesta por la permanencia de un docente acusado de acoso.
La movilización, que comenzó la semana pasada, se ha intensificado con marchas y ocupaciones de los espacios universitarios. Según testimonios de estudiantes, ya se habrían detectado más de 20 casos de acoso de distinto tipo, lo que motivó la elaboración de un petitorio formal dirigido a la dirección de carrera.
Entre las principales exigencias, los estudiantes solicitan la desvinculación inmediata del profesor señalado, asegurando que las medidas propuestas por la institución —como ofrecer clases telemáticas con el docente— “no garantizan seguridad ni reparación”.
Asimismo, acusan falta de apoyo ante problemas de salud mental, señalando que la universidad no ha permitido justificar inasistencias por este motivo durante el segundo semestre.
“Nuestra lucha no es solo por este caso, sino por un cambio profundo en cómo se abordan los temas de acoso y salud mental en la UC Temuco” expresó una estudiante de la Universidad.
A través de un comunicado, la UC Temuco indicó que se han aplicado los protocolos institucionales en materia de género y convivencia universitaria, asegurando procesos “seguros, confidenciales y con enfoque de derechos”.
La casa de estudios también reiteró su compromiso con la equidad de género y la construcción de una comunidad libre de violencia, destacando que reforzará los mecanismos de apoyo y acompañamiento.
Mientras el paro y la toma continúan, los estudiantes aseguran que mantendrán las movilizaciones hasta obtener respuestas concretas. La situación refleja un creciente malestar dentro de los espacios universitarios del país, donde las denuncias por acoso y las demandas por ambientes seguros siguen en aumento.