El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este lunes que ocho barcos militares de Estados Unidos, equipados con 1.200 misiles y un submarino nuclear, se encuentran desplegados en el Caribe con la mira puesta en su país. El mandatario calificó la situación como una “amenaza absolutamente criminal” y la comparó con la crisis de los misiles en Cuba de 1962.

“Venezuela está enfrentando la más grande amenaza que se haya visto en nuestro continente en los últimos 100 años. (…) Ellos han querido avanzar hacia lo que llaman la máxima presión, en este caso militar, y nosotros hemos declarado la máxima preparación para la defensa de Venezuela”, afirmó en una conferencia de prensa con medios internacionales.

Maduro aseguró que no cederá ante “chantajes ni amenazas de ningún signo” y acusó a sectores de Miami de haber tomado el control político de la Casa Blanca y del Departamento de Estado. Además, criticó lo que calificó como una “narrativa absurda” de Washington, que justifica la presencia de los buques bajo el argumento de combatir el narcotráfico.

El líder chavista reveló que los canales de comunicación con Estados Unidos, uno con John McNamara, encargado de Negocios interino, y otro con Richard Grenell, enviado especial del entonces presidente Donald Trump, se encuentran “malogrados y maltrechos”. Pese a ello, sostuvo que Venezuela seguirá trabajando en la repatriación de migrantes, incluidos los deportados desde EE.UU.

En otro momento, Maduro apuntó directamente contra el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, a quien calificó como “el señor de la guerra”. Según dijo, busca “manchar las manos de Donald Trump de sangre venezolana, suramericana y caribeña”.

Finalmente, advirtió que si Venezuela fuera atacada, pasaría a un “periodo de lucha armada en defensa del territorio nacional”, con una estrategia “eminentemente defensiva” que combinaría la vía diplomática y militar.

Fuente: biobiochile.cl