El emblema de la tripulación del Sombrero de Paja une a jóvenes de todo el mundo en movimientos contra la corrupción y la opresión, inspirados por la cultura pop y el anime japonés.

La Jolly Roger, bandera pirata de la serie de anime y manga japonesa One Piece, se ha transformado en un símbolo de resistencia y unidad para la Generación Z en movimientos de protesta internacionales.

El icónico emblema de la Tripulación del Sombrero de Paja, liderada por Monkey D. Luffy, apareció por primera vez en protestas estudiantiles en Indonesia y rápidamente se expandió a países como Nepal, Filipinas, Serbia, Kenia, Marruecos, Perú, Paraguay y Madagascar.

En One Piece, Luffy y su tripulación desafían a figuras corruptas y defienden la libertad y la justicia, valores que resuenan entre los jóvenes activistas. La bandera se ha utilizado para denunciar la corrupción, exigir derechos y representar la lucha contra sistemas opresivos, convirtiéndose en un emblema viral en redes sociales.

En Madagascar, los manifestantes adaptaron el símbolo al colocar un satroka, sombrero tradicional Betsileo, sobre la calavera pirata, representando unidad y cultura local.

La adopción de símbolos de la cultura pop en protestas no es nueva: la máscara de Guy Fawkes, el maquillaje del Joker y el saludo de tres dedos de Hunger Games han tenido impactos similares en distintos movimientos juveniles globales.

Virgilus Slam, activista malgache, explica: “Luffy es un chico que lucha y siempre quiere hacer del mundo un lugar mejor… Estos mensajes parecen idealistas, pero los idealistas son quienes cambian el mundo”.

La bandera de One Piece demuestra cómo la cultura pop puede convertirse en una herramienta de movilización social y un símbolo de esperanza para la juventud global.